martes, 11 de septiembre de 2012

90 años

Hace unos días fue el cumpleaños de mi abuelo. Un personaje que jamas conocí muy bien, pero quise asistir a su celebración.
Esta se realizó en Pirque en la casa de mis primos, otro mundo, otra vida.
Como era de esperar, mi expectativas eran muy elevadas por este grandioso y pomposo evento, así que me dirigí directo a la cocina a ver los manjares que nos tenían preparados.
Primero que nada una edificación inmensurable me dio la bienvenida.


Luego un sin fin de brebajes en una bandeja llamo mucho mi atención y me quedé pegada toda la tarde en tomar una solo, el delicioso y bien vestido pisco sour.
 La decoración del pisco sour me encantó. Había el popular Kir Royal, con crema de cassis y champaña, jugos de frambuesa y naranja, vino, vino y más vino (la familia posee una viña)


 En un tumulto de gente pude divisar ciertos apetitosos appetizer como este delicioso paté con gelatina de vino tinto y blanco una delicia!!!!!
 Empanadas de pino minis, que estaba para chuparse los dedos.
Y el infalible quesillo con aji verde 
Mi mamá hizo unos palitos de queso con un poco de picante que estaban deliciosos y acompañaban muy bien los tragos.

La mesa está servida....
Un salón hermoso con muchas mesas redondas, con manteles bordados y lindas decoraciones de centro nos recibió y claramente nos hizo sentarnos inmediatamente ya que cada puesto tenía servido uno de mis moluscos favoritos.
 Ostras deliciosamente frescas
 De segundo unos riquisimos ñoquis hechos a mano con camarones y una salsa de queso espectacular.
 Galletas con sésamo para acompañar la torta de cumpleaños y el café
Linda tarde, lindo encuentro y deliciosa comida hicieron de esta celebración un banquete para mis ojos y mi estomago y fue rico respirar el aire limpio de Pirque.

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